drogado hasta los ojos de ocupaciones, con la mente ocupada en mil cosas intrascendentes, escondido en un trabajo para no tener que delinquir. Hoy casi consigo ser normal, o feliz, como ellos lo llaman.
Lastima que en el trayecto hasta mi casa, tengo que ver el glorioso espectáculo de dos polígonos químicos de nivel 3, una térmica, dos petroleras y 5 o 6 polígonos industriales al uso, en la salida del valle, al pasar entre los parques de la sierra calderona y espadan, junto a la fundición de aluminio (apenas contamina) que esta sobre el cauce del rió palancia durante 4 o 5 kilómetros un paraje calcinado por el fuego de este verano, y claro, es lo que tiene haber sido camionero, que pese a ser solo un homohabilis, para mantener las distancias, la velocidad y no salirme de la vía, con apenas unos kbtes de cerebro y la mirada perdida en el asfalto, aun puedo pensar en cosas simples, yo no quisiera, pero puedo...
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